Fayad descartó usar el superávit de 2022 para dar aumentos salariales

El Ministerio de Hacienda tuvo un remanente de 57 mil millones de pesos, que se utilizará para pagar la deuda y para financiar la obra pública. Críticas al canje de deuda en pesos.
El ministro de Hacienda y Finanzas, Víctor Fayad, celebró el cierre de las cuentas del 2022, que arrojaron un superávit corriente de casi 75 mil millones de pesos. El Gobierno dijo que lo utilizará para pagar los vencimientos en dólares que tiene la Provincia en marzo.

Mientras el Ejecutivo se encamina a enfrentar una nueva discusión paritaria con los gremios estatales, desde Hacienda insistieron en que los excedentes generados no serán destinados para los aumentos salariales.
Los números del 2022
“Este año tuvimos una ejecución presupuestaria similar a la del 2021, con un superávit algo menor. Esto muestra una tendencia al equilibrio fiscal. Si uno lo mantiene en el tiempo se transforma en un activo para las distintas administraciones, ya sea para el personal, los proveedores, los contratistas de obra pública, los acreedores, porque confían en que van a cobrar en tiempo y forma”, afirmó Fayad.
En detalle, explicó que “el cierre del 2022 arrojó un superávit, después de amortizaciones de la deuda, de 9 mil millones de pesos, y un superávit corriente, el que se utiliza para financiar la obra pública y pagar la deuda, de casi 75 mil millones de pesos”.
Para entender estas cifras, el funcionario ejemplificó que el gasto salarial mensual que tuvo en enero el Gobierno fue de 20 mil millones de pesos.
Por contrapartida, para la oposición, llegar a este superávit derivó de una subejecución del presupuesto, es decir, que lo que recaudó el Gobierno no lo gastó, según la legisladora provincial Mercedes Derrache.
En Hacienda reconocen que la primera parte del año fue “floja”, pero que “los datos del segundo semestre muestran un repunte de la obra pública y transferencias al IPV”. Así se defienden de las críticas de la oposición al señalar que en ese periodo “no ha habido una subejecución considerable, se han utilizado casi la totalidad de las partidas”.
“Un superávit de menos del 2% no tiene que ver con una subejecución, se da por las distintas dinámicas que han tenido los recursos y los gastos. El segundo semestre se recuperó, y fue cuando se utilizaron la mayor cantidad de partidas”, agregó Fayad para refutar al peronismo.
El destino del superávit
Con estos datos, ahora la pregunta es qué hará la Provincia con este excedente. El ministro, al igual que el año pasado, remarcó que no se destinará al pago de aumentos salariales, como pidieron los gremios, especialmente el Sindicato Unido de Trabajadores de la Educación (SUTE), conducido por el kirchnerismo. Este jueves, el Gobierno comenzará las rondas de paritarias, las primeras del año.
“Lo importante (del superávit) es sostenerlo. No podés gastar en gastos corrientes lo que generaste porque en algún momento esa cuenta no cierra, no podemos usar un stock para pagar un flujo, porque en algún momento se te acaba, y cuando eso pasa estamos en problemas”, fundamentó Fayad.
Sobre el destino, entonces, el funcionario explicó que una parte pasó a ser un remanente del ejercicio de este año. En otras palabras, sostuvo que “la idea es que los recursos corrientes cubran el gasto corriente y se genere un excedente para el plan de obra pública y el pago de la deuda”.
“El plan de obra pública se resintió muchísimo en 2020, le costó arrancar en 2021, ya está recuperado en 2022 porque tiene una inercia. Para financiarlo uno necesita generar los superávit para hacer frente a esos pagos“, añadió.
La Provincia decidió pagar los vencimientos de la deuda, que tiene la primera fecha en marzo, por 60 millones de dólares, y otra en septiembre. De esta manera, el Gobierno comenzará el 14 de marzo el proceso para obtener la autorización del Banco Central para adquirir esa divisa.
Así, no avanzará con el decreto que habilitó el roll over hasta tanto la Suprema Corte de Justicia se expida al respecto. El Ejecutivo evitó el paso por la Legislatura y utilizó el artículo 68 de la Ley de Administración Financiera de Mendoza (Nº 8.706), el cual otorga al autorización para operaciones de crédito público destinadas exclusivamente a la reestructuración de deuda, según el oficialismo.
“El Estado está preparado para hacerle frente a todos sus compromisos, no es un problema afrontar el pago, sí es una picardía que pudiendo conseguir financiamiento barato en pesos tengamos que usar parte de nuestro colchón, el Fondo Anticíclico, para pagar esa deuda. Esos fondos podrían duplicar nuestro plan de viviendas, pero no, si pudieras refinanciar podríamos hacer muchas otras cosas”, explicó Fayad.
A nivel nacional, el ministro de Economía, Sergio Massa anunció un canje de deuda en pesos para postergar vencimientos hasta 2024 y 2025. Al respecto, el funcionario opinó que es una situación distinta a la de Mendoza.
“Es un disparate lo que están haciendo los bancos, refinanciar sin pedir nada a cambio, como mínimo pedile que ordenen las cuentas, es difícil entenderlo. No tienen un plan, es patear la pelota al córner. Se han autogenerado un problema del que no pueden salir, no quieren pagar los costos que implica salir, prefieren que lo pague otro. Es muy distinto ir a pedir refinanciar una deuda cuando uno tiene las cuentas ordenadas“, comparó respecto del roll over que el Frente de Todos ha negado en la Legislatura.
Paritarias
En cuanto a las negociaciones paritarias, Fayad sostuvo que “el eje rector” es tratar de que los salarios acompañen a la inflación “sin comprometer las cuentas públicas”.
“La inflación que el Gobierno nacional no puede controlar la tenemos muy en cuenta para diseñar las ofertas paritarias. Si uno da más de lo que tiene empiezan a resentirse todos los servicios”, señaló.
Los gremios, por su parte, irán a los encuentros con los porcentajes de aumentos firmados en otras provincias y los de la paritaria nacional como piso.
“Ya perdimos un punto en enero y vamos a seguir perdiendo en febrero y en marzo, porque si llegamos a un acuerdo se va a implementar recién en abril”, comentaron desde el SUTE.
Ampros, en tanto, dijo que pedirán recuperar el poder adquisitivo perdido. “Hay una crisis en salud con profesionales que se van de la provincia porque quedarse no les conviene económicamente. Necesitamos tener salarios más atractivos“, destacaro