Por falta de agua, una escuela de Ciudad vuelve a las clases virtuales

Desde el inicio del ciclo lectivo, la institución acusó la falta del recurso hídrico. Los padres exigen que se solucione el problema en forma inmediata, mientras Aysam e Infraestructura Escolar se pasan la pelota.

Cumplir con los 185 días de clases establecidos por la Dirección General de Escuelas para algunas instituciones educativas de Mendoza se volvió una meta difícil de alcanzar.
En el arranque del ciclo lectivo 2023, los alumnos de la escuela Domingo Faustino Sarmiento de Ciudad tuvieron clases en forma intermitente por falta de agua. Sin lograr dar con la causa del inconveniente, Infraestructura Escolar y Aysam (Agua y Saneamiento Mendoza) se pasan la pelota.
En el medio del debate, la institución decidió dejar de especular e informó este martes a los padres que la enseñanza se realizará en formato virtual hasta que se restablezca el servicio.
En el mensaje detallaban además que “comenzará en la institución escolar obras de refacción de cañerías y tanques”. Y sumaron: “Se les irá informando de los avances de la misma y la fecha de retorno a la presencialidad”.
Desde la cartera al frente de Guillermo Carbonell, señalaron que el problema no se encuentra dentro del edificio de la institución ubicada en calle Julio Argentino Roca 343, de Ciudad, sino puertas afuera.
“Hay falta de presión desde la red que maneja Aysam”, indicaron desde Infraestructura Escolar, dependiente del Ministerio de Planificación e Infraestructura Pública, y detallaron que una cuadrilla comprobó el estado de las cañerías, las cuales quedaron operativas, aunque confirmaron que se van a realizar trabajos de refacción en las cañerías.

En tanto, especificaron que el inconveniente fue reportado desde la escuela el 2 de marzo.
Desde Aysam refirieron que un equipo estuvo en el lugar y detectó que el inconveniente es interno de la escuela primaria y no de este organismo. “Estamos colaborando para que puedan identificar el problema”, agregaron.
“Nadie se hace cargo”
Pese a que la DGE también especificó que los reclamos no se dieron hasta el 2 de marzo, consultados por El Sol, padres de la escuela primaria comentaron que desde el 27 de febrero, día en que inició el ciclo lectivo, sus hijos acusaron la falta del recurso hídrico.
Lo mismo ocurrió la jornada siguiente y con idas y vueltas, en medio de la incertidumbre, lograron completar 4 días de clases.
“No entendemos cómo la DGE permitió que empezaran las clases sin agua. Los chicos no pudieron ni lavarse las manos ni ir al baño porque estaban sucios”, dijeron indignados.
La semana pasada y por medio de una nota, la comunidad escolar elevó su malestar al director General de Escuelas, José Thomas.
En el escrito solicitaron en forma “inmediata y urgente” que se resuelva su reclamo y que se proceda a ejecutar las partidas presupuestarias para llevar adelante las reparaciones necesarias.
“Exigimos condiciones dignas de trabajo para todo el personal y alumnado que merecen poder tener baños limpios, en condiciones y con agua”, destacaron.
