El balance del sector hotelero fue positivo, aunque mantienen la incertidumbre por la competencia de destinos internacionales para los meses de enero y febrero.

El último fin de semana extralargo del 2025, impulsado por el feriado del Día de la Inmaculada Concepción, dejó un balance favorable para la actividad turística en Mendoza. Según informó Marcelo Rosental, presidente de la Cámara Hotelera de la provincia, la ocupación en Ciudad alcanzó el 75%, impulsada por la llegada de visitantes atraídos por eventos culturales y musicales de gran convocatoria.
“El fin de semana fue bueno, el balance positivo: un 75% de ocupación son los números que manejamos”, sostuvo en diálogo con El Sol al evaluar el movimiento turístico.
Entre los factores que contribuyeron a ese nivel de demanda, Rosental destacó espectáculos que lograron atraer público nacional: Hernán Cattáneo y la Fiesta Provincial de la Cerveza fueron dos de los eventos que mayor tracción generaron.
A nivel nacional, Mendoza se ubicó quinta como destino con mayor movimiento y promedio un gasto de $90.000 por turista. La provincia tuvo un movimiento turístico significativo, pero más tranquilo que el de noviembre.
Un verano con señales mixtas
A pesar del buen rendimiento del fin de semana largo, el sector hotelero mantiene una postura prudente de cara a la temporada verano 2026. El especialista explicó que el mercado interno enfrentará una fuerte competencia de destinos internacionales que continúan siendo atractivos para los argentinos.
“Tenemos incertidumbre dado que tenemos que competir con destinos como Chile o Brasil, que siguen siendo muy elegidos por los argentinos para viajar afuera antes que por el mismo país”, remarcó el titular de la Cámara.
Frente a ese escenario, las proyecciones para el verano aún son moderadas: “De cara al verano, hay expectativas de que haya reservas de último minuto, que la gente se decida a viajar por Argentina, pero son más expectativas muy distintas a la realidad de la actualidad”.
En cuanto al desempeño del fin de semana extralargo, se confirmó una tendencia que se vio durante todo el año: los eventos masivos y las experiencias culturales continúan siendo motores fundamentales para el turismo en Mendoza. Esto compensando parcialmente la caída del turismo tradicional y la cautela del visitante nacional.
