Miles de personas se han visto afectadas por las intensas lluvias torrenciales que azotan desde el martes la región central de Chile, y que desde la madrugada de este jueves (13.06.2024) golpean también a Santiago de Chile, la capital del país, donde ya han causado desalojos por inundación, interrupciones del suministro de electricidad y problemas de tránsito.
Una de las situaciones más dramáticas se vive en la ribera del río Curanilahue, en la región del Biobío, donde más de 5.000 personas se han visto obligadas a abandonar sus casas por el desbordamiento de las aguas, luego de que cayera en pocas horas el total de lluvia que normalmente cae en un año. En la misma región, otras 400 familias debieron igualmente huir de sus casas por el desborde de otro de los cientos de ríos que existen en las regiones centrales de Chile.
Más al norte, en el Maule, un hombre falleció durante la madrugada tras recibir el impacto de un poste de electricidad vencido por el viento, que en algunas zonas del país está superando los 80 kilómetros por hora. En Santiago, en tanto, las grandes avenidas se han transformado en torrentes, se han acumulado grandes bolsas de aguas en parques y jardines mientras que en las poblaciones o campamentos irregulares, los barrizales y los desprendimientos han dejado a decenas de personas sin refugio en sus precarios hogares.
Decretaron “estado de catástrofe”
La Dirección Meteorológica de Chile emitió una inusual “alarma climática”: el máximo nivel de advertencia a la población por las intensas precipitaciones y vientos de las últimas 48 horas. La emergencia abarca a 14 de los 20 millones de chilenos que viven en cinco de las 16 regiones del país: Coquimbo (norte), Valparaíso y Metropolitana, (centro) y O’Higgins, Ñuble y Biobío (centro-sur).
“Estas lluvias van a continuar de forma muy fuerte, lamentamos un primer fallecido”, dijo el presidente Gabriel Boric, en un mensaje desde Suecia, donde se encuentra de visita oficial. La ministra del Interior y vicepresidenta de Chile, Carolina Tohá, se trasladó hasta Curanilahue para evaluar los daños. Antes de subir al avión, informó que para agilizar el despliegue de recursos se decretó estado de “catástrofe” en las cinco regiones del país más golpeadas por las lluvias.
El frente frío está acompañado “de un río atmosférico” categorizado entre 4-5 en un escala de máximo cinco, por la cantidad de vapor de agua disponible, lo que “aumenta considerablemente la cantidad de precipitaciones esperadas”, según la Dirección Meteorológica. El fenómeno azota a una zona de Chile que sufría una intensa sequía desde hace quince años.