Tras los resultados de los exámenes de ingreso a las escuelas de la universidad, docentes particulares expresaron su preocupación y aseguraron que observan una caída en el nivel educativo.
Tras los bajos resultados en las pruebas de ingreso a las escuelas de la UNCuyo, profesores de apoyo se mostraron preocupados por el nivel de los chicos, y afirmaron que hay grandes dificultades relacionadas con conocimientos básicos, como comprensión lectora y la resolución de operaciones de suma y resta en el caso de Matemática.
Además, manifestaron que en ocasiones observan falta de compromiso de los padres en torno a la educación de sus hijos, en un panorama donde el aprendizaje no siempre es una prioridad.
Pablo da clases hace 23 años. Si bien comentó que es habitual que la demanda de apoyo escolar crezca en esta época, resaltó que los chicos llegan en peores condiciones.
“Los chicos no saben sumar, restar, multiplicar. Ha bajado muchísimo el nivel educativo. Les preguntás cuánto es 2×6 y pueden contestar cualquier cosa. Llegan a nosotros pidiendo resultados que son demasiado en relación con lo que saben, a lo que les están enseñando y a lo que les están exigiendo en las aulas“, destacó el docente en diálogo con El Sol.
Estaban, quien también es profesor particular, coincidió con lo expuesto y comentó las dificultades que observa en los alumnos.
“Llegan con los conocimientos básicos. Hay deficiencia en Matemática, que se deriva a las demás materias. Los chicos no tienen comprensión lectora, no saben interpretar un problema“, aportó.
Esperar hasta último momento
En la recta final del ciclo lectivo 2024 aumentan las consultas para tomar clases de apoyo. Sin embargo, mientras los docentes particulares necesitan tiempo para reforzar los conocimientos, los padres piden asistencia con muy poca anticipación.
“Incrementaron las consultas de los que buscan clases a último momento. El padre o tutor no se entera con anticipación que el chico se lleva la materia; no están muy metidos en la educación de los alumnos. Hay responsabilidad del alumno y falta de dedicación de los padres“, afirmó Esteban.
Micaela, profesora de Matemática, coincidió: “Son pocos los casos que piden con anticipación. Generalmente, te avisan una semana antes“.
Pablo, por su parte, explicó que por ejemplo para Matemática los chicos deberían ir a clases tres veces por semana durante un mes, pero contó que recién van a cuatro días de rendir, o como mucho, una semana antes.
La traba económica
A pesar de que los especialistas expresaron que en ciertas oportunidades falta compromiso de los adultos, aseguraron que lo económico también influyen.
Actualmente, muchas familias no pueden cubrir los gastos que implica una clase particular, que parte en $4.000 y puede costar hasta $12.000 por hora.