Si bien con el Hot Sale hubo un repunte en las ventas, las expectativas ahora están puestas en la imposibilidad de ir a comprar al vecino país.
A un mes para que arranque el invierno en el Hemisferio Sur y en los negocios de venta de indumentaria del Gran Mendoza están expectantes por un factor externo que puede significar el éxito o el fracaso de la temporada. La mirada de los comerciantes ahora está puesta en el paso a Chile y la imposibilidad de cruzar por mal tiempo en alta montaña.
El rubro indumentaria fue el que más aumentó en abril, con un 23,7%, debido a los cambios de temporada. En lo que va del año, según los datos otorgados por la Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económicas de Mendoza (DEIE), subió 56,6%, mientras que en la comparación interanual, el precio de la ropa se incrementó 223,1%.
Pese a eso datos “duros”, los empresarios del sector afirman que la remarcación con respecto a abril de 2023 es inferior, llegando al 100%.
En ese contexto, y teniendo en cuenta que una familia necesitó $730.000 para no ser pobre, vestirse para no pasar frío durante el invierno tiene un costo que no baja de los $200.000.
“Por ahora la gente lo que está haciendo es comprarse lo que realmente necesita. Lejos está la época de comprarse algo por un gustito. Los que compran, realmente es por necesidad”, dijo Romina, una vendedora del centro.
Las camperas abrigadas para hombres tienen un precio que va desde los $75.000 a los $120.000. Los que buscan tendencia podrán encontrar sacos gaban o tapados de paños desde $199.000.
Las poleras, los pullovers y los chalecos rondan los $50.000, siempre dependiendo de la calidad de la prenda.
En el caso de las mujeres, las preferencias a la hora de comprar es ropa de abrigo. “Mucha friza y de abrigo”, comentó una vendedora.
Las camperas arrancan en los $65.000, los buzos desde $49.000, los camisacos desde los $79.500, los cuellitos desde $10.000, en tanto los pantalones de jeans tienen un costo que va desde los $65.000 y los sastreros, desde $64.000.
Efecto Chile en los comercios locales
No hay un solo comerciante que al ser consultado niegue que Chile le está haciendo “daño” a los negocios locales, sobre todo, a los vinculados con el rubro indumentaria, calzado y electrónica.
“Con el Hot Sale las ventas repuntaron un poco, fue un respiro importante que tuvimos respecto al panorama que traíamos y ahora, con el cierre del paso a Chile por una semana, esperamos que este viento a favor persista un poco más”, expresó Juan Cruz, encargado de una tienda de ropa para hombres.
El vendedor comentó que a raíz de los resultados alcanzados por el Hot Sale, muchos comerciantes decidieron extender los descuentos hasta este lunes, inclusive.
Está claro que el golpe que han sentido los comerciantes en los últimos meses ha sido mucho y eso tiene que ver con la diferencia de precios y calidad entre los productos de Chile y los de acá.
“La mayoría de los mendocinos que viaja al vecino país no sólo va en busca de zapatillas y electrodomésticos o electrónica, sino que también aprovechan para comprar ropa (para grandes y chicos) y la diferencia de precios es grande, por encima del 50%, incluso”, dijo una vendedora.