Las mismas serán utilizadas en zapatillas ecológicas.
Los atletas olímpicos japoneses que suban al podio en París tendrán algo más que una medalla de la que enorgullecerse: la huella de carbono de sus equipaciones ecológicas.
Al presentar el miércoles la indumentaria oficial del equipo japonés, Asics dijo que las chaquetas, pantalones y demás prendas que los atletas llevarán en el podio y en las ruedas de prensa llevarán estampada la cantidad de dióxido de carbono emitida durante su producción, en un guiño a los objetivos ecológicos propuestos por la ciudad anfitriona.
La chaqueta del traje de calentamiento del equipo muestra 8,8 kg de equivalentes de dióxido de carbono (CO2e) emitidos en su producción, mientras que los pantalones muestran 5,5 kg de CO2e.
“Los Juegos de París se anuncian como el acontecimiento más sostenible de la historia olímpica, así que nos hemos ceñido a ese concepto”, declaró Makoto Ohori, director de desarrollo de ropa y equipamiento de Asics.
La empresa, con sede en Tokio, dijo que había reducido las emisiones de las equipaciones oficiales en un 34% respecto a los Juegos de Tokio, utilizando materiales reciclados y más ligeros, así como energía renovable en su fábrica de Japón.
La exhibición de credenciales ecológicas se ha convertido en una parte obligatoria de los últimos Juegos, pero el objetivo de París es el más ambicioso hasta la fecha: reducir a la mitad la huella de carbono en comparación con la media de 3,5 millones de toneladas de emisiones de CO2 de los anteriores Juegos Olímpicos de Verano.
“Calculando la huella de carbono de cada artículo y etiquetándola en los productos, esperamos aumentar la transparencia y la concienciación de los atletas respecto al medio ambiente”, declaró Ohori, de Asics.
Científicos de Naciones Unidas afirman que es imprescindible reducir a la mitad las emisiones de gases de efecto invernadero para 2030, a fin de frenar el aumento de la temperatura media en más de 1,5 grados centígrados.
El responsable del clima del organismo internacional declaró este mes que el mundo tiene dos años para tomar medidas que eviten un cambio climático mucho peor.