Se trata de las rutas provinciales 51, 151 y 206.
Tras un convenio público-privado entre la Dirección Provincial de Vialidad (DPV) y los productores ganaderos, el organismo vial encaró la conservación de las rutas del Sur provincial que utiliza la actividad, que cría medio millón de cabezas de ganado bovino en el secano mendocino.
Maquinaria pesada, operarios, transporte de toneladasde áridos y miles de litros de agua se necesitan para reparar y recuperar los tramos afectados de estas rutas remotas que se adentran en el desierto provincial.
Este acuerdo de colaboración ha permitido que la DPV esté reparando y manteniendo las rutas provinciales 51, 206 y 151, cuya superficie es de suelo natural, las que son intervenidas y consolidadas para que los productores ganaderos puedan ingresar y sacar sus animales de sus campos.
La conservación de estas vías del desierto en los sectores críticos no se resuelve solo pasando una máquina, sino que exige numerosas camionadas de áridos para rellenar y emparejar los tramos afectados y el riego de la traza intervenida, para que quede compactado.
El consejero de Zona Sur de Vialidad Mendoza, Leonardo Viñolo, destacó que “este acuerdo mutuo nos permite resolver a ambas partes una problemática que se presenta todos los años porque estas rutas consolidadas se desmejoran con el uso y los eventos climáticos, obligándonos a una intervención permanente para que mantener la transitabilidad”.