La propuesta tiene por finalidad lograr que los alumnos no abandonen sus estudios. Los aportes irán desde los 2 mil a los 14 mil pesos.

Credit: El Sol

En medio de la crisis económica que atraviesa la Argentina, la situación que se vive en las universidades públicas es compleja y Mendoza no está ajena al panorama. Este año, más de 3.500 alumnos de la Universidad Nacional de Cuyo (UNCuyo) enviaron solicitudes de becas, sólo 2.423 completaron en tiempo y forma los formularios y de ellos, 1.803 recibieron la ayuda, el resto quedó excluido por falta de presupuesto.

Ante este panorama, graduados de la UNCUyo presentaron el proyecto Impulsá Futuro, un programa que se enmarca dentro de la Extensión Universitaria y que tiene por finalidad ayudar económicamente a estudiantes sin recursos .

En esta primera instancia, “sólo accederán a la ayuda aquellos alumnos que a comienzo de este año solicitaron becas en la Secretaría de Bienestar y que, por cuestiones presupuestarias, no lograron un otorgamiento. Se trata de unos 600 estudiantes”, contó Leonardo Camacho, Consejero Graduado de la UNCuyo y uno de los impulsores del proyecto.

Comer en el comedor universitario tiene un costo de 2 mil pesos.

En la actualidad, la UNCuyo cuenta con un total de 33 mil graduados empadronados, pero el registro empezó a generarse en el 2003, por lo que se estima que en total los graduados son unos 60.000, teniendo en cuenta las carreras más antiguas, vigentes desde la creación de la casa de estudios.

Cuándo empieza y cómo funcionará

A mediados de agosto se pondrá en marcha el proyecto. Las donaciones y aportes se recibirán a través de Impulsores, la plataforma innovadora que la Universidad lanzó en 2023 con la idea de fomentar el desarrollo de fondos para proyectos tecnológicos y científicos, culturales y artísticos, creativos y de liderazgo social transformador.

Todo lo recaudado ingresará al Fondo UNCUYO, gestionado por la Fundación de la Universidad (FUNC), que será la encargada de administrar los recursos y de marcar la trazabilidad.

Respecto a los aportes que realizarán los graduados que quieran ser parte de la propuesta, el gestor del proyecto contó que existen dos alternativas:

  • Un aporte mínimo, equivalente a una bandeja de comedor que, en junio de este año, estaba valuada en dos mil pesos.
  • Y la otra opción, es una beca de ayuda económica establecida en 14.000 pesos.

Una vez que el sistema esté en marcha, los graduados tendrán la opción de donar una o más becas mensuales. El importe donado será descontado de la tarjeta de débito o crédito de la personas e inmediatamente irá al Fondo Uncuyo que se encargará del proceso de transferencia“, explicó Camacho.

La donación, por parte de los graduados, puede ser por un sólo mes o mantenerse a lo largo del tiempo, de acuerdo con la voluntad y sus posibilidades económicas.

Asimismo, se está trabajando entre las distintas áreas de la UNCUyo en la posibilidad de brindar beneficios a los que forman parte de Impulsá Futuro. Uno de ellos, tiene que ver con la posibilidad de deducir las donaciones de Ganancias.

Otra opción es poder hacer uso de los Quinchos de la UNcuyo durante un determinado tiempo, también se baraja la posibilidad de otorgar entradas para el cine o teatro en la Nave Universitaria; acceso libre y gratuito al Camping de El Carrizal o el refugio de Vallecitos, alternativas con las que se pretende agradecer el compromiso de los donantes.

Agradecer la posibilidad de estudiar

El proyecto surgió como un modo de agradecimiento a la Universidad pública por permitir que miles de estudiantes logren su objetivo académico sin necesidad de afrontar un costo significativo, según detalló Camacho.

En ningún momento este proyecto tiene por objetivo eludir la responsabilidad del Gobierno nacional de financiar al sistema educativo universitario, por el contrario buscamos ser una fuente alternativa y complementaria del fondo de becas“, recalcó el consejero.

Camacho invitó a los graduados a sumarse a este tipo de iniciativas, a pesar de la difícil situación económica que la sociedad está atravesando.

La idea es devolverle un poquito de todo lo que nos dio la universidad pública a los estudiantes. Somos profesionales gracias a la educación pública y nuestro compromiso con ella traspasa las generaciones. Sigamos generando más y mejores oportunidades para que nadie se vea privado de acceder, permanecer y egresar de la universidad y de esta forma ser los profesionales del futuro”, concluyó.

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