El Senado aprobó el proyecto enviado por el Poder Ejecutivo, tal como había votado semanas atrás la Cámara de Diputados.
Con 24 votos a favor y 14 en contra, el Senado convirtió en Ley la adhesión de Mendoza al RIGI (Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones). Semanas atrás, el proyecto había sido aprobado por la Cámara de Diputados.
El debate de este martes generó que se divida la oposición, particularmente el interbloque de La Unión Mendocina, donde algunos votaron a favor -Gabriel Pradines, Germán Vicchi, Martín Rostand y Valentín González- y otros en contra -Flavia Manoni, Ariel Pringles, Marcos Quattrini-.
Un dato no menor es que el líder de este espacio, Omar De Marchi, forma parte del Gobierno nacional de Javier Milei que impulsó el RIGI en la Ley Bases.
Terminada la votación, afuera de la Legislatura los manifestantes que rechazaban la adhesión al RIGI, incluido dirigentes de Montoneros, “pasaron lista” de los senadores que avalaron el proyecto al grito de “traidor” o “traidora”.
El RIGI contempla a proyectos con inversiones de más de 200 millones de dólares. En Mendoza, con esto se apunta principalmente a potenciar el desarrollo de la minería metalífera, principalmente en el departamento de Malargüe, donde pronto se espera obtener autorización para explorar decenas de áreas.
Entre otros puntos, el RIGI establece beneficios fiscales, como la exención de nuevos gravámenes locales y la limitación de las tasas retributivas al costo específico del servicio. Esto mejora la rentabilidad y viabilidad económica de los proyectos de minería metalífera.