Los costos de las bicicletas son un 50% más elevados, sin embargo, los aficionados se inclinan por el mercado local. Lo mismo ocurre con la calidad y la variedad de modelos que se consiguen en el exterior.
A pesar de que las bicicletas cuestan un 50% más en Mendoza que en Chile, muchos ciclistas optan por comprar en la provincia. El factor que los motiva tiene que ver con la financiación que se ofrece, la que resulta más atractiva que las opciones disponibles en el vecino país.
De este modo, el mercado extranjero no se transforma en una amenaza para los comerciantes locales, como sí pasa en otros rubros, como indumentaria. Sin embargo, no se puede pasar por alto que la calidad y variedad de productos ofrecida en Chile es superior a lo que se comercializa en Mendoza.
“Si bien durante el primer semestre de este 2024, las ventas han bajado considerablemente respecto al mismo periodo del 2023, no consideramos al mercado chileno como una competencia o como causal de la baja. La realidad es que la gente prioriza otras cuestiones, incluso, opta por productos mucho más económicos”, comentó Flavia Ambrosi, una de las responsables de Ambrosi Bicicleterías.
En contrapartida, Brenda Sánchez, de Todociclismo advirtió: “Nosotros estamos vendiendo muy bien. Tenemos un 30% más de venta que el año pasado en la misma fecha. Los clientes nos eligen por tres puntos fundamentales: la financiación accesible, ya que ofrecemos 12 cuotas sin interés, un reconocido servicio posventa y por la tranquilidad que tiene el consumidor al comprar en un negocio con 30 años de trayectoria”.
Comprar en cuotas, la elección
“Hace unos meses, comprar una bici en Mendoza se ha vuelto atractivo para muchos aficionados, pero sólo por la posibilidad que ofrecen los comercios de adquirirlas en cómodas cuotas. Esa modalidad hizo que muchos apostemos al mercado local en lugar de viajar a Chile”, comentó Marcelo, uno de los tantos ciclistas de la provincia.
El hombre hace muy poco se compró una bici de una muy buena marca y la pagó casi un 50% más caro que lo que hubiera gastado en Chile. “La ventaja es que la financié, no contaba con el efectivo”, manifestó.
La responsable de Ambrosi profundizó en el regreso a la financiación como ventaja comparativa con los mejores precios que se encuentras detrás de la cordillera. De hecho, eligen la mayor cantidad de cuotas sin financiación: “La gente está llevando bicicletas económicas, con valores que rondan los 300.000 y 400.000 pesos“.
Sin embargo, la comerciante, agregó que existe un porcentaje de clientes que opta por las 12 cuotas, debido a que los costos financieros han bajado “y el interés que se le aplica no es alto”.
Para graficar la realidad de precios con Chile, Marcelo dijo que traer una Trek Merlin del vecino país implica un costo de unos 500 dólares, aproximadamente. Para evitar la recarga de impuestos con crédito o débito que hay respecto a las compras en el exterior, hay que pagarla en efectivo. Pero a esa suma hay que agregarle un filtro en Horcones: en la aduana sólo está permitido pasar productos hasta un tope de 300 dólares.
“Si bien los comerciantes facturan por un precio menor, si uno va a Chile no lo hace sólo para buscar una bici, por lo que no es tan conveniente”, graficó.
Con todo, en Mendoza hay una desventaja que, al menos, hay que asumirla, según indican los ciclistas que buscan buenos rodados. Pese a las ventajas de la financiación, no se consiguen productos de muy buena calidad, como sí ocurre en Chile. “Hay buenas bicicletas, pero los modelos son muy viejos, estamos muy atrasados respecto a lo que se ve en el exterior, en calidad y variedad”, aseguró Marcelo.
Bicicletas no, cubiertas sí
A pesar de que los mendocinos eligen gastar más, pero financiado, en donde no negocian es en los accesorios que requieren para armar una buena bici, entre ellos, los neumáticos.
Carlos, otro aficionado local, comentó que tal como ocurrió meses atrás con los neumáticos de los vehículos, conviene muchísimo cruzar la cordillera para comprar neumáticos y otros insumos.
“Hace unas semanas viajé y me compré un par de Cross Max, una de las mejores líneas de cubiertas. En Mendoza las conseguía por encima de los 50.000 pesos. Cada una, allá compré las dos a 36.000 pesos (argentinos). La diferencia es grande y en eso sí conviene ir y buscar”, comentó.
Chile también ofrece otra ventaja: más variedad en cascos y zapatos para andar en bici. En la plaza trasandina los ciclistas señalaron que la variedad “es enorme”, pero los precios son mucho más elevados que en Argentina. Esta diferencia se basa en las primeras marcas que se pueden encontrar en el mercado. “Allá no existen las marcas secundarias como en Argentina, y eso se paga”, expuso Carlos.
A modo de cierre,el mismo ciclista contó que con 700.000 pesos argentinos, uno viaja a Chile y se trae una buena bicicleta, pero para eso es necesario tener la plata en mano, nada fácil con la situación actual del país.