Banco de Alimentos y Alimentando el Mañana apuntan a elaborar 500 mil platos con frutas y verduras. La acción contra el hambre para 250 niños del Valle de Uco

Banco de Alimentos y Alimentando el Mañana asisten a comedores para elaborar 25 mil platos a base de frutas y verduras que ayuden a terminar con el hambre de niños de Mendoza. Imagen ilustrativa. Totti Rios /Diario UNO
Banco de Alimentos Argentina y el programa Alimentando el Mañana acordaron un ambicioso plan contra el hambre: servir 500.000 platos de comida de origen vegetal en 48 organizaciones del país, de las cuales 9 están en Mendoza.
El plan exigió un trabajo previo los últimos meses con instituciones de Valle de Uco, Río Cuarto (Córdoba), y Goya (Corrientes) Apunta a alimentar a 7.000 personas, entre niños, adolescentes y adultos que van a escuelas, comedores y merenderos de cada ciudad.
En Valle de Uco la acción está coordinada con 9 puntos de encuentro entre comedores y merenderos. La entidad ya programó el entrenamiento de 17 cocineros/as que van a participar del plan durante los próximos meses, según explicaron desde BdA.
Sobre el alcance de la acción, el potencial estimado es lograr cocinar más de 25 mil raciones anuales de comidas 100% de origen vegetal. O sea, un 5% del total de platos a servir por Banco de Alimentos, que trabaja hace 23 años con la misión de combatir el hambre a partir de un trabajo colaborativo con organizaciones sociales.
“Un kilo de alimentos equivale a 3 platos de comida, con lo cual vamos a poder llegar en esta primera etapa a 250 chicos que van a escuelas con comedores a SEOS o jardines maternales y merenderos”, señaló Dora Salinas, directora ejecutiva de Banco de Alimentos Valle de Uco.

Colaboradores y chefs que trabajan en Banco de Alimentos para combatir el hambre, esta vez con un nuevo plan nutricional para comedores.
Foto: Banco de Alimentos
Alianza por alimentos saludables y contra el hambre
Para eso, productores y empacadores del Valle de Uco aportan frutas y verduras de estación: desde manzanas y peras hasta zanahoria, distintos tipos de zapallo y papa, entre otros productos.
“Una alimentación sustentable no solo es saludable y nutritiva, sino accesible para todos. Implica que sea culturalmente aceptada, económicamente justa, asequible, segura y adecuada nutricionalmente, además de elaborarse con uso eficiente de los recursos naturales”, señaló Alexandra Navarro, Senior Lead de Políticas Alimentarias de Alimentando el Mañana.
Desde las entidades destacaron que más allá de facilitar el acceso a alimentos saludables, otro objetivo es lograr incorporar a las comunidades prácticas de cocina y tecnologías adaptadas a su realidad.
Para Amanda Reboratti, Gerente de Fortalecimiento de Banco de Alimentos, “las alianzas son clave para potenciar el impacto de nuestro trabajo. Con Alimentando el Mañana compartimos la necesidad de promover una alimentación más saludable y sustentable, especialmente en contextos de vulnerabilidad”.
Según Reboratti, la alianza contra el hambre “permitió llegar a organizaciones sociales con capacitaciones, recursos como las ollas brujas (que funcionan con calor retenido y facilitan la cocción con menos consumo de energía), y asistencia técnica que permite no solo incorporar nuevos ingredientes sino repensar sus prácticas de cocina diaria”.
Alimentos de origen vegetal: el plan en Mendoza
La alimentación basada en plantas integrales o whole foods plant based diet es un patrón dietario en el que se incluye una mayor cantidad de alimentos de origen vegetal sin procesar o mínimamente procesados.
Esta alimentación abarca cinco grandes grupos: frutas, vegetales, granos, legumbres, grasas y adicionales como levaduras, tofu y germen de trigo.
“La idea es armar cocinas con recetarios a base de frutas y verduras de estación que rescatamos de las fincas. Hubo un primer encuentro para que los chefs tengan información para hacer un recetario y proveérselo a los responsables de los comedores”, precisó Salinas respecto a la prueba piloto de 6 meses que ya está en marcha.
La directiva de Banco de Alimentos en Valle de Uco explicó que se viene una segunda etapa, que es dictar clases de cocina: “El desafío es que al menos una vez por semana se elabore comida de origen vegetal, como budines de zanahoria y zapallo para la merienda de los chicos”.
Aunque no son estacionales, Banco de Alimentos y Alimentando el Mañana también contemplan otras fuentes proteicas, como los derivados de la soja (tofu, soja texturizada y tempeh); germen de trigo, frutos secos como maní, almendras, nueces y avellanas, semillas de calabaza y lino, entre otras.
Quienes quieran colaborar, pueden obtener información en www.redbda.org.ar y en www.arg.alimentandoelmanana.org.