El Ente de Recuperación de Fondos para el Fortalecimiento del Sistema de Salud de Mendoza lleva recaudados miles de millones de pesos. El dinero vuelve en gran parte a hospitales y permitió comprar ocho ambulancias.
El Ente de Recuperación de Fondos para el Fortalecimiento del Sistema de Salud de Mendoza rige en la provincia desde agosto de 2024 y se encarga de cobrarle las obras sociales y a las prepagas por la atención de sus afiliados en los hospitales y centros de salud públicos. Un año y un mes después de su implementación, lleva facturado más de $27.000 millones. Un porcentaje retorna a los centros sanitarios para la compra de insumos y, el otro, es destinado a equipamiento, como la reciente compra de ocho ambulancias UTI por parte del Ministerio de Salud y Deportes.
El organismo dispone de un Concejo Consultivo integrado por todos los directores de los hospitales públicos y su responsable es Daniela Correa. Comenzó a funcionar luego de la sanción definitiva de la ley en la Legislatura, en el marco de la presentación de más de 20 proyectos para realizar cambios en el sistema de salud.
En diálogo con El Sol, Sabrina Cavello, subsecretaria de Gestión y Administración del Ministerio de Salud y Deportes de la provincia, ahondó en la temática y contó que “el nivel de facturación alcanzado supera el 650% de facturación desde el 2023 cuando el Reforsal no existía”.
“El sistema de cobro ahora es mucho más ágil porque ya no lo enviamos más a lo que era antes la Superintendencia -cuando pasaba el plazo y no nos pagaban la deuda corriente-, sino que ahora lo mandamos a trámite judicial a través de la boleta de deuda. Esa fue una de las innovaciones con esta ley: el cobro a través de la boleta de deuda que es por una vía judicial“, expresó.
La funcionaria indicó que de enero a agosto el ente facturó $22.000 millones. Lógicamente, el monto del 2025 supera al obtenido en todo el 2024, donde el Reforsal funcionó apenas en los últimos cuatro meses y facturó $5.000 millones. Para tomar dimensión, la recaudación de septiembre ronda los $1.500 millones y es similar a lo recaudado en todo el 2023.
Desde que se puso en vigencia el sistema, el número de no residentes que se atiende en el sistema público se redujo. El Reforsal, entre otras cuestiones, habilita el cobro a extranjeros que se atiendan en hospitales públicos de Mendoza. Según pudo averiguar El Sol, en lo que va de 2025 se recaudaron $37.000.000. “Ya no hay tantas consultas como antes”, comentaron a este medio.
A dónde van los fondos que recauda el Reforsal
De la facturación total del Reforsal, el 70% de esa atención de pacientes se inyecta de nuevo a los hospitales. Solo el 15% queda en las arcas del Ministerio de Salud para la compra de, por ejemplo, ambulancias. De este modo, cada hospital tiene la facultad de adquirir insumos, contratar servicios y bienes de capital, así como renovar equipamiento instrumental y cubrir otras necesidades médicas, priorizando en cada caso las demandas específicas de cada efector y centro de salud. “Eso ya queda en la administración de cada uno”, deslizó la funcionaria.
El otro 15% es destinado al Fondo de Transformación Digital y a la administración del personal del ente, que es de aproximadamente 15 personas más los refuerzos en los efectores.
Cavello manifestó que “con la plata que ahora se recauda, que antes se perdía y quedaba en la nada porque ni siquiera se registraba, logramos cambiar y mejorar en este caso el equipamiento del Servicio Emergencia Coordinado. Renovamos la flota por unidades 0km. Este último lunes hicimos la primera compra de ocho con dinero del Reforsal. Antes compramos doce, pero con dinero de rentas generales”.

Desde el Ministerio aseguran que PAMI y OSEP siguen siendo los mayores prestadores a los que se les cobra a través el Reforsal. “El proceso judicial es el que hacemos a través de la boleta de deuda. Se emite una boleta para el pago, un trámite judicial corto y mucho más simple que el inicio de un juicio. Cuando no la pagan, pasados los plazos, tenemos a los abogados que terminan embargándole los bienes a la obra social. Eso sí ha pasado“, dijo respecto cómo es el funcionamiento.
“Las obras sociales hacen auditorías permanentemente a nuestras prefacturas para decir ‘esto no lo cubro porque le faltó tal documentación’. Entonces ahí empieza la parte del Estado que tiene que lograr facturar eso. Una vez que está facturado, pasado el plazo, normal y habitual, si la obra social no paga, nosotros ya estamos en condiciones de hacer la boleta de deuda, que ahí inicia el proceso judicial. El porcentaje de embargo es muy bajo. Con este procedimiento logramos que se preocupen en pagar en tiempo y forma. Antes pasaban los años y prescribían las deudas“, sumó.
En tanto, relató que “antes de entrar al proceso judicial”, se puede “convenir un plan de pago que, por supuesto, implica el cobro de intereses porque se determina en cuotas”. “Eso está funcionando bastante bien, las obras optan por ese plan de pago antes de llegar a la boleta de deuda. Las tasas son mensuales y son intereses por mora”, cerró Sabrina Cavello.