El Gobierno necesita reforzar la presencia de uniformados en las calles y en lugares estratégicos como la videovigilancia. A la par, se enfrenta a otra situación: los uniformados que dejan la fuerza.
En lo que va del año, la Policía de Mendoza ha registrado unas 77 bajas, entre policías que accedieron a la jubilación y otros que renunciaron al uniforme y entregaron el arma. En tanto, el Ministerio de Seguridad encaró un reclutamiento de retirados y quiere sumar unos 70 agentes que hicieron el servicio militar voluntario, que cuentan con adiestramiento y quieren sumar a la vigilancia urbana pero con un curso intensivo de policía.
En los últimos meses, la cartera que encabeza Mercedes Rus abrió una convocatoria para que policías y agentes penitenciarios retirados puedan reincorporarse a la actividad. Además, estudiantes avanzados en criminalística o ciencias forenses, así como soldados que hayan completado el servicio militar, también podrán sumarse a la Policía de Mendoza.
Actualmente, la Policía de Mendoza cuenta con 9.500 agentes activos. En el Ministerio informaron que hasta octubre se produjeron 77 bajas y que esperan cerrar el año con un total de 600 efectivos egresados.
En cuanto a las bajas, señalaron que, de las 77 registradas en el año, 31 corresponden a salidas obligatorias relacionadas con jubilaciones, enfermedades o licencias. Las 46 restantes fueron renuncias de policías que entregaron sus armas y decidieron no seguir prestando servicios.
En el mismo período pero de 2023, se produjeron 23 bajas obligatorias y 60 entregas de armas. La funcionaria destacó que, aunque en 2024 ha habido menos salidas, tanto los estudiantes avanzados como los soldados realizarán el curso de Policía para “que no existan diferencias” entre los uniformados.
“Para no hacer diferencias, todos deberán pasar por todo el plan de estudios de la Policía. La única diferencia es que lo harán en un período más corto, pero más intensivo. Sus conocimientos adquiridos sobre investigación ayudan a acelerar este proceso, pero se complementarán con el manejo de armas, operativos y tareas cotidianas”, justificó Rus.
Soldados voluntarios
A principios de agosto, el Gobierno emitió el decreto 1445, que habilita a estudiantes avanzados de carreras vinculadas a criminalística, ciencias forenses, investigación e inteligencia criminal a incorporarse a la Policía de Mendoza, con la condición de que antes deben realizar un curso intensivo.
Los soldados deberán realizar el curso de Policía, también intensivo, que comenzará el 2 de diciembre. Hasta el momento, cerca de 70 personas se han inscripto. Tuvieron que someterse a estudios médicos realizados por OSEP.
La ministra de Seguridad reveló que esta iniciativa surgió a partir de encuentros con autoridades del Ejército, quienes le manifestaron la posibilidad de incorporar a jóvenes que habían completado su servicio militar, pero que no deseaban continuar en la carrera la fuerza armada. Estos podrán estar en funciones como polícia en el primer trimestre de 2025.
En el IUSP revelaron que 41 estudiantes se encuentran en la etapa final de este curso intensivo y que a mediados de diciembre estarán en funciones. El cursado comenzó a principios de septiembre.
“Con este programa, buscamos contar con más recursos policiales rápidamente y con la formación necesaria en el manejo de armas y procedimientos propios de la policía”, afirmó Rus.
En el Ministerio de Seguridad están considerando que estos 41 nuevos miembros, que comenzarán a trabajar en diciembre, sean asignados a la Dirección General de Investigaciones (DGI) para abordar delitos comunes, como el robo de cobre o delitos de carácter científico. También podrían ser destinados al ciberpatrullaje.
Policías retirados, menos del 50%
A mediados de octubre, el ministerio lanzó un voluntariado para reincorporar a 120 policías retirados para que presten servicios en el Centro Estratégico de Operaciones (CEO) o de diversas áreas de investigación. Hasta el momento, sólo 50 han sido confirmados y comenzarán a trabajar a partir del próximo año.
En el edificio ubicado en calle Salta 672, en Godoy Cruz, indicaron que se han presentado cerca de 100 voluntarios pero que estos 50 confirmados han pasado superado los filtros que el ministerio exige. La convocatoria no tiene fecha de cierre y se continuarán evaluando los perfiles.
“No tenemos una fecha de cierre porque estamos en pleno proceso de entrevistas. Los voluntarios deben pasar por una serie de filtros. Allí evaluamos su interés y si están aptos para las funciones, ya que son personas que han estado fuera del sistema laboral”, explicó la ministra.
La convocatoria se originó tras la sanción definitiva de la Ley de Videovigilancia. Esta norma ha permitido al Ejecutivo incorporar nuevas tecnologías, como inteligencia artificial y cámaras privadas, al sistema de videovigilancia. Según Rus, quieren que destinar a ese centro de monitoreo a los retirados porque “ya que tienen una visión del trabajo que manejan con el código policial y el sistema TETRA, lo que nos permite evitar una capacitación previa“.
A la par, 16 exagentes del Servicio Penitenciario se sumarán próximamente a la Dirección de Promoción y Control de Liberados. El cupo original era para 30 personas, se está evaluando la posibilidad de reducir esta cifra. Estos ingresos surgen a partir de la sanción de la Ley 9565.