La violencia dejó además más de 12.000 reclusos prófugos y llevó a las fuerzas armadas a asumir el control de las calles
Nepal vivió un caos absoluto durante los últimos cinco días: un toque de queda, la renuncia del ahora ex primer ministro Khadga Prasad Sharma Oli y al menos 51 muertes durante las violentas protestas que sacudieron al país.

Según confirmó el portavoz policial Binod Ghimire, más de 12.500 prisioneros siguen prófugos tras escapar de varias cárceles durante los disturbios. Las protestas comenzaron el lunes en Katmandú y otras ciudades, en rechazo al bloqueo de las redes sociales y a la corrupción gubernamental.Los restos del edificio del Parlamento nepalí (REUTERS/Adnan Abidi)
El primer ministro KP Sharma Oli presentó su dimisión el martes, durante una jornada de fuerte violencia en la que manifestantes incendiaron la sede del Parlamento, edificios gubernamentales, un centro comercial y un hotel Hilton.

“He renunciado al cargo de primer ministro con efecto desde hoy… para dar pasos hacia una solución política y la resolución de los problemas”, expresó Oli en una carta enviada a la Presidencia.Vista del complejo de oficinas que albergan las reuniones del premier y sus ministros (REUTERS/Navesh Chitrakar)
“A pesar del restablecimiento de plataformas como Facebook, X o YouTube, la promesa de una investigación sobre la violencia policial y la renuncia del primer ministro, algunos grupos de jóvenes manifestantes bajo el paraguas de ‘Generación Z’ saquearon el martes edificios públicos y residencias de dirigentes”, señalaron fuentes policiales presentes en la capital.

Además de irrumpir en el Parlamento e incendiarlo, manifestantes prendieron fuego la residencia del hasta entonces jefe de Gobierno y otros principales líderes políticos. El jueves, las autoridades de Nepal informaron que más de 200 de los 12.500 presos fugados durante la semana ya fueron recapturados, en medio de un operativo desplegado tras los incidentes y la renuncia del primer ministro.Cientos de vehículos quedaron calcinados en Nepal luego de varios días de protesta (REUTERS/Navesh Chitrakar)
Entre las viviendas incendiadas durante las protestas en Nepal figuran las residencias de Sher Bahadur Deuba, líder del Congreso Nepalí, el mayor partido del país; del presidente Ram Chandra Poudel; del ministro del Interior, Ramesh Lekhak; y del líder del Partido Comunista de Nepal Maoísta, Pushpa Kamal Dahal. Además, manifestantes prendieron fuego a una escuela privada propiedad de Arzu Deuba Rana, esposa de Deuba y actual ministra de Relaciones Exteriores.
Por qué estalló la crisis en Nepal
El jueves 4 de septiembre, el Gobierno del primer ministro Sharma Oli dispuso el bloqueo de 26 redes sociales, incluyendo Facebook y YouTube. La medida coincidió con la expansión de una campaña viral en TikTok, conocida como “Nepo Kid”, que exponía denuncias de corrupción entre miembros de la élite política del país.