El español ganó un partidazo ante el número uno del mundo y sumó su 16° título en su corta carrera
Carlos Alcaraz se consagró campeón en el ATP 500 de Beijing tras derrotar en una final apasionante al italiano Jannik Sinner 6-7, 6-4 y 7-6. El partido que se desarrolló en la capital de China cautivó a los espectadores, ya que se trataba de un enfrentamiento entre dos de los mejores jugadores del circuito y llamados a ser el futuro del tenis.
En una de las jugadas que se vio en la final, el español que se encuentra segundo en el ranking ganó un punto clave en el tie break del tercer set. La acción se desarrolló con un 3-1 en el marcador en favor del número uno del mundo y un intenso peloteo en el que ambos se atacaron con golpes profundos.
Tras el intercambio, Alcaraz sacó un derechazo cruzado desde el fondo de cancha que exigió a Sinner. Con la pelota cerca de la red, el español tenía el punto prácticamente servido y eligió un toque corto para hacer correr al italiano, quien llegó a salvar la bola y obligó al esfuerzo de Charly, que pudo sentenciar el punto.
El festejo del tenista de 21 años fue elocuente y acompañó los gritos de los aficionados que llenaron el Diamond Court llevándose la mano a la oreja para pedir más aliento. Es que el punto de Alcaraz significó el 2-3 para descontar en un momento crítico del partido. Luego, terminaría ganando el tie-break (7-3) con cinco puntos consecutivos.
Alcaraz logró una victoria impresionante en Beijing ante Sinner, quien defendía la corona. Este triunfo marcó el 16º título en la carrera del joven tenista español, consolidando su posición en el circuito profesional.
El enfrentamiento, que duró casi tres horas y media, fue un duelo intenso entre dos de los tenistas más prometedores del momento. Alcaraz se impuso de manera ajustada, demostrando una vez más su capacidad para manejar la presión en momentos críticos. Con esta victoria, el oriundo de Málaga amplía su ventaja en los enfrentamientos directos contra el italiano, llevándose el sexto triunfo en diez encuentros, y el tercero consecutivo este año tras sus victorias en Indian Wells y Roland Garros.
El partido estuvo lleno de altibajos para Alcaraz, quien alternó momentos de brillantez con desconexiones que casi le cuestan el primer set. A pesar de tener oportunidades para cerrar el set inicial con su servicio, no logró capitalizar tres bolas de ‘break’, permitiendo que Sinner tomara la delantera. Sin embargo, en el segundo set,Charly mostró mayor consistencia, manteniendo su servicio intacto y logrando un quiebre crucial en el noveno juego.
El tercer set fue un reflejo de la intensidad del partido. Alcaraz rompió el servicio de Sinner en el tercer juego y se adelantó 3-1, pero una nueva desconexión permitió al italiano recuperar terreno y colocarse 4-5. En un juego lleno de intercambios espectaculares, el español logró igualar a cinco juegos, llevando el set a un tie-break decisivo. A pesar de comenzar con una desventaja de 0-3, Alcaraz recuperó su mejor nivel y ganó siete puntos consecutivos para asegurar el título.
“En el tercer set, con 0-3 y dos mini-braks en contra, no perdí la esperanza y pensé que tenía que darlo todo para intentar darme una oportunidad”, explicó Alcaraz tras el partido. “Jugué tres grandes puntos para igualar a 3, y después sólo pensé en ir a por todas. Si perdía, al menos, iría a por ello”, analizó.
La próxima semana, ambos tenistas podrían enfrentarse nuevamente en el Masters 1000 de Shanghai, sumando un nuevo capítulo a esta creciente rivalidad. Alcaraz, conocido por su estilo de juego agresivo y su capacidad para generar golpes ganadores, deberá trabajar en reducir sus errores no forzados, que en este partido fueron 52 frente a los 31 de Sinner.
Carlos Alcaraz con el trofeo tras ganar el ATP 500 de Beijing en la final con Jannik Sinner (REUTERS/Tingshu Wang)