La comuna comandada por Marcos Calvente tomó la determinación en el marco de la delicada situación que atraviesan los vecinos de zonas aledañas al Canal Pescara en Guaymallén.

El Concejo Deliberante de Guaymallén aprobó formalmente la declaratoria de emergencia ambiental y sanitaria tras el colapso del colector cloacal en la calle Humberto Primo, que ha afectado zonas pobladas y productivas del departamento.
El derrame de efluentes cloacales -producto del colapso del colector de AySAM en la calle Humberto Primo- ha contaminado espacios públicos, aguas y áreas agrícolas en Guaymallén. La situación impacta directamente a vecinos, usuarios del sistema y productores rurales, y se considera de interés interjurisdiccional.
La emergencia alcanza zonas densamente pobladas y productivas, generando preocupaciones sanitarias por la contaminación del Canal Pescara y sectores anexos como Los Corralitos, Colonia Segovia, Puente de Hierro y El Sauce. El daño ambiental y productivo es significativo.
“Declárese la Emergencia Ambiental y Sanitaria para los sectores afectados comprendidos por la intersección de calles Severo del Castillo y 2 de Mayo, Distrito Los Corralitos y con posibilidad de afectación de diferentes sectores de los Distritos Puente de Hierro, Colonia Segovia y El Sauce del Departamento de Guaymallén“, dice el escrito publicado en el Boletín Oficial.
Como relató El Sol, Los Corralitos se transformó en un foco de crisis sanitaria tras los diversos hechos de contaminación ambiental registrados en el último tiempo. Los olores fétidos y derrames provenientes de la colectora cloacal que transporta los desechos de más de 600.000 mendocinos fueron el disparador de decenas de reclamos de los vecinos que sufrieron un colapso en sus viviendas. El problema fue creciendo ya que tras los derrames controlados en el canal Pescara, se dio a conocer que más de 500 hectáreas cultivadas se vieron afectadas.
La contaminación con desechos cloacales en Guaymallén comenzó -al menos- hace cuatro años en la intersección de las calles Severo del Castillo y 2 de Mayo. Los vecinos de la zona denunciaban que las calles se inundaban con los efluentes cloacales de una colectora obstruida que transporta los líquidos cloacales de más de 600.000 mendocinos (Luján, Maipú, Guaymallén y parte de Godoy Cruz).
El líquido altamente contaminante quedaba sobre la calzada, banquina, acequias, arroyos y veredas aledañas. Los transeúntes y vehículos que circulaban por la zona también eran afectados por los residuos cloacales. En consecuencia, hubo una serie de reclamos por parte de la oposición.
Un mes atrás, desde Irrigación señalaron que “el sistema tiene un caño donde desagotan las industrias pero que está controlado aunque puede haber algunas clandestinidades de las cuales se va a encargar la inspección Pescara que administra la subdelegación porque está intervenida, eso va a mejorar en calidad dentro de poco tiempo porque ya se conectó la Coca-Cola y se va a conectar la Cervecería dentro de poco, lo cual aumenta el caudal con un líquido que no tiene valores que perjudiquen esto, sino al contrario”.
“Hay otro cauce abierto que también se llama Pescara, que es una suerte colectora regional, que viene desde la ruta 60. En ese lugar, no sólo se producen vuelcos clandestinos ya que muchas propiedades no tienen sistema cloacal. Todo eso hay que evitarlo y vigilarlo permanentemente“, fueron las palabras del superintendente de Irrigación, Sergio Marinelli.
Previamente, Juan Correa, director de Ambiente y Energía de Guaymallén, atribuyó el colapso a la antigüedad de la infraestructura: “Las cloacas fueron instaladas hace alrededor de 40 años. Cualquier infraestructura de décadas sin mantenimiento adecuado puede colapsar”.