Omar Montenegro, presidente del club, dialogó con el Post y compartió detalles sobre lo sucedido tras la final con FADEP.
El pasado sábado, Fundación Amigos por el Deporte (FADEP) se consagró campeón del torneo Clausura de la Liga Mendocina de fútbol al vencer a Guaymallén por penales, después de un reñido partido que finalizó 2-1 a favor de los ganadores.
Sin embargo, al término del encuentro, se produjo un tenso incidente entre allegados del club Guaymallén y representantes de la Asociación Civil Árbitros Mendocinos Asociados (ACAMA). Según testigos, el vicepresidente de ACAMA, Germán Malovini, aceleró su vehículo de manera temeraria, intentando escapar de los reclamos de los seguidores de Guaymallén.
Durante esta maniobra, casi atropella a familiares y jugadores del club, lo que generó una situación de gran alarma en el lugar.
Omar Montenegro, presidente de Guaymallén, dialogó con el Post y compartió detalles sobre lo sucedido. “El partido había terminado y, mientras intentaba consolar a algunos jugadores tras la dura derrota, comenzamos a escuchar gritos. Al acercarnos a la entrada, vimos que el vehículo que transportaba a los árbitros salió de manera imprudente, arremetiendo contra las personas que se encontraban allí”, explicó.
Montenegro relató que su esposa le advirtió sobre el peligro que corría su hija, al tratar de cruzar el camino del vehículo. “Al acercarme a mi auto, encontré salpicaduras de piedra, lo que indicaba que el conductor había perdido el control y comenzó a raspar y lanzar piedras, algunas de las cuales impactaron en el costado izquierdo de mi vehículo”, detalló.
El presidente también expresó su preocupación por la imprudencia del árbitro. “Como vicepresidente de la asociación de árbitros, debería haber adoptado una postura más conciliadora. Su comportamiento fue inaceptable”, afirmó.
Montenegro aclaró que, aunque no presentaron una denuncia penal, sí realizaron una exposición ante la unidad fiscal de Maipú. “Esto no implica que vayamos a denunciar a la Liga, que ha sido muy solidaria con nosotros. Estoy agradecido por el apoyo del presidente de la Liga, pero este señor no actuó de la misma manera”, añadió.
Finalmente, Montenegro reafirmó la disposición del club al diálogo: “Seguimos abiertos al diálogo; el Club Guaymallén siempre está dispuesto a conversar”. La situación deja un sabor amargo tras un partido que debería haber sido solo una celebración del fútbol.