El radicalismo, el PRO y los partidos cercanos a Milei votaron a favor de otorgar herramientas a empresas de grandes capitales para incentivar las inversiones
El PJ, La Unión Mendocina, el Partido Verde y el Partido de los jubilados votaron en contra del RIGI.
Si bien la Cámara de Diputados de Mendoza aprobó este miércoles por amplia mayoría la adhesión al Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI) -uno de los logros más celebrados por el gobierno de Javier Milei al aprobase la Ley Bases- hubo algunas voces que se opusieron a la iniciativa. Ahora pasó al Senado.
Estas vinieron desde el PJ, La Unión Mendocina, el Partido Verde y el Partido de los jubilados, entre otros.
Entre los argumentos de quienes no quisieron acompañar al RIGI, se encuentran los defensores de darle oportunidades y beneficios a las pymes y empresas más pequeñas, ya que muchas de ellas se encuentran con dificultades muy grandes para mantenerse.
Sin embargo, el argumento de quienes apoyan al RIGI es el de favorecer grandes inversiones es equivalente a grandes oportunidades para la provincia.
Una de las grandes industrias que se verá favorecida por el RIGI es la minería
Apoyo a las grandes inversiones
El diputado Jorge López (UCR), titular de la comisión de Hacienda, Presupuesto y Asuntos Tributarios, fundamentó el proyecto en la Sesión señalando que a nivel nacional el país se ha vuelto inviable y poco atractivo para la inversión estratégica y a largo plazo, principalmente debido a la alta presión impositiva.
En este sentido, mencionó que hay 148 impuestos entre nacionales, provinciales y municipales, además del cepo cambiario, y la maraña de limitaciones a las importaciones y exportaciones. Según opinó López, esto debería estar más flexibilizado y ser más accesible.
Según el legislador radical, el RIGI no busca reducir ni eximir del pago de impuestos provinciales. Lo que busca es dar certidumbre y estabilidad fiscal para que estas grandes inversiones puedan desarrollarse en Mendoza.
Guillermo Mosso (PRO) apoyó el proyecto afirmando que “el RIGI es un régimen de beneficios de tipo aduanero, impositivo y cambiario para lograr atracción de inversiones en sectores que son motores de crecimiento para la economía argentina estancada. Sectores donde hay inversiones de escala importante, por eso se habla de un monto de 200 millones de dólares como mínimo, y pone un plazo para adherirse”.
También Gustavo Cairo (LLA), expuso que “los que se quejan de las grandes inversiones no se dan cuenta que las necesitamos. La política mendocina se ha enredado en un círculo chiquito. Se trata de generar divisas para equilibrar la economía, algo que repercute luego en la estabilidad e incluso para la economía doméstica”.
En contra del RIGI
José Luis Ramón (Partido Consumidores y Ciudadanos) , expresó su voto negativo señalando que “es darle permiso a un grupo reducido de apoderarse de la actividad económica, en perjuicio del pueblo, porque van a dar la habilitación legal para incursionar en nuestra provincia, en nuestro país y llevarse lo más caro que tenemos nosotros como capital”.
En tanto que Gabriela Lizana (FRM-LN) dijo que estas medidas desoyen los reclamos históricos de las pymes, las deja sin competitividad y sin políticas de desarrollo nacional.
En la misma línea se manifestó Valentina Morán (PJ), opinando que “ofrece privilegios a quienes van a hacer inversiones, que serán empresas que superen inversiones de 200 millones de dólares, en detrimento del desarrollo productivo de nuestro país. Hay que pensar en el país, en nuestra soberanía”.
En coincidencia, Jorge Difonso de LUM afirmó que “el proyecto es inconstitucional, va en contra de la ley de ambiente y de ordenamiento territorial y destacó que “volvemos 50 años atrás”, diciendo que este proyecto genera competencia desleal.
Otros que se manifestaron en contra del RIGI fueron los peronistas Verónica Valverde y Juan Pablo Gulino, Edgardo Civit Evans, del Partido de los Jubilados, y Emanuel Fugazzotto del Parido Verde.