Estudios indican que algunas vitaminas son esenciales para el buen funcionamiento del cerebro, por lo que su deficiencia puede perjudicar la salud mental.
Una vez más vemos la importancia de una dieta sana y equilibrada. No sólo contribuye a la salud del cuerpo sino que también influye en la salud mental. Así es… estudios han demostrado que algunas vitaminas son esenciales para el cerebro, por lo que su deficiencia afecta la salud mental.
Cómo la falta de vitaminas puede afectar la salud mental
La salud mental es un aspecto fundamental del bienestar general y la nutrición juega un papel importante en él. Entre las vitaminas más importantes para la salud mental destacan las del complejo B y las vitaminas C y D. Entender cómo cada uno impacta al cerebro cuando hay una deficiencia de ellos.
Vitamina D
Los principales alimentos que aportan vitamina D son: el pescado graso, la yema de huevo, las setas y la leche. Sin embargo, la principal fuente de esta vitamina es la luz solar. Se recomienda exponerse al sol al menos 15 minutos, 2 a 3 veces por semana pero evitar el horario comprendido entre las 10 am y las 4 pm.
Las vitaminas que se encuentran en diversos alimentos naturales, como la vitamina C, influyen en el equilibrio emocional y la salud del cerebro. Sus deficiencias pueden estar relacionadas con la aparición de trastornos como ansiedad, depresión, fallos de memoria y dificultad de concentración.
La vitamina D contribuye a la producción de serotonina, una sustancia química relacionada con la sensación de bienestar. Pero la falta de esta vitamina se ha relacionado con un mayor riesgo de depresión y ansiedad, así como con problemas de memoria y concentración. Un estudio realizado en 2022 por investigadores chinos, por ejemplo, demostró la correlación entre niveles bajos de vitamina D y depresión.
Vitamina C
La vitamina C se encuentra principalmente en frutas cítricas, fresas, pimientos y brócoli. Es un poderoso antioxidante que protege al cerebro contra el daño oxidativo y reduce el estrés oxidativo.
Según una investigación de la Universidad Flinders en Australia, puede influir directamente en la salud cognitiva. Su deficiencia se ha asociado con episodios de confusión mental y pérdida de rendimiento cerebral y síntomas de ansiedad, depresión y fatiga.
Vitaminas del complejo B
Entre ellas se encuentran las vitaminas B6, B9 (también conocida como ácido fólico) y B12, que ayudan en la producción de neurotransmisores, como la serotonina y la dopamina, que intervienen en la regulación del estado de ánimo y el estrés.
Se encuentran principalmente en alimentos como carne, pescado, productos lácteos, huevos, cereales integrales y verduras de hojas verdes oscuras.
Su deficiencia puede provocar problemas de memoria, confusión mental y fatiga, así como síntomas de depresión, ansiedad e irritabilidad. Un estudio de la Universidad de Reading en el Reino Unido mostró que la suplementación con B6 ayudó a reducir los síntomas de ansiedad y depresión en adultos jóvenes.