La mayor demanda está dada en Residencia, Comedor y Transporte. Muchos alumnos becados abandonan sus estudios por no poder afrontar los gastos.
La situación que atraviesan las universidades públicas de Argentina es compleja y en Mendoza las instituciones no están ajenas al panorama. Sin un presupuesto definido, aún, las autoridades de la Universidad Nacional de Cuyo (UNCuyo) informaron a El Sol que creció un 39% el número de solicitudes de becas respecto al 2023.
Asimismo, refirieron que se ha observado una deserción importante de estudiantes que teniendo becas no pueden hacer frente a los gastos universitarios.
El contexto no es nada fácil, sobre todo, si se tiene en cuenta que el Índice de Precios al Consumidor registró un incremento de 11% en marzo. El rubro que más aumentó fue Educación (52,7%), en tanto, el transporte se ubicó en cuarto lugar con un aumento del 13%.
Ante esto, el próximo 23 de abril, el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) que reúne a rectores y rectoras de todas las universidades nacionales del país convocó a defender “la educación pública, la ciencia y el sistema universitario nacional”.
Becas en aumento, pero con limitaciones
A principios de este año, la rectora de la UNCuyo, Esther Sánchez, en conferencia de prensa confirmó que las becas están garantizadas e incluso aseguró, que tienen planeado incrementar la cantidad de asistencias en 2024.
“Se van a aumentar porque entendemos que la demanda será mayor. Habrá ayuda económica en transporte, residencia, comedor y todas aquellas necesidades que acompañen a los estudiantes en su proceso“, explicó.
Sin embargo, la crisis obligó a aplicar un drástico ajuste. “Este año lo que hemos observado es una alta demanda de postulaciones. Hasta principios de marzo que se cerró la inscripción hubo 3.508 pedidos, un número superior al del 2023 que llegó a 2.144, es decir, hablamos de un 39% más interanual”, expresó Mariana Azcárate, directora de Acción Social de la Secretaría de Bienestar de la UNCuyo.
En la UNCuyo existen dos tipos de becas estudiantiles:
- Continuidad. Una vez obtenida el alumno no se debe presentar a otra convocatoria y se renuevan cumpliendo ciertos requisitos, entre ellos, rendimiento académico de los alumnos.
- Anual o sin continuidad (transporte, comedor). Se da de baja automáticamente a fin de año y exige una reinscripción anual.
“Si bien la demanda creció, también es oportuno aclarar que este año se implementaron nuevas restricciones. A modo de ejemplo, el año pasado, el estudiante podía acceder a tres becas (Comedor, Ayuda Económica y Transporte) en tanto, ahora tiene que optar entre una de Continuidad (Residencia) o dos becas anuales como son Comedor y Ayuda Económica”, afirmó Azcárate.
Las preferencias de los estudiantes
Entre las ayudas a las que pueden acceder los alumnos, una de las más solicitadas es la de Residencias. La misma está destinada para estudiantes que residen a más de 50 kilómetros de la Ciudad de Mendoza.
“Este año recibimos 380 postulaciones para este beneficio. Si bien contamos con 92 residencias, sólo 56 están disponibles. Al ser una beca de continuidad, los que acceden pueden disponer del beneficio a lo largo de dos años”, comentó la licenciada.
Además, los estudiantes pueden acceder a una comida diaria en el Comedor (sólo días hábiles) y reciben una ayuda económica de 9.000 pesos para gastos extras (un 44% más que en el 2023, que fue de 5.000 pesos).
Un dato a tener en cuenta es que una vez que se vence el contrato de la Residencia, los alumnos reciben un monto económico para poder alquilar en otro lugar.
“Este año el monto disponible sería de 28.136 pesos (en el 2023 la ayuda era de 9.360 pesos). Por el momento no está definido el monto final porque no contamos con presupuesto, pero entendemos que la cifra es muy inferior al importe que se exige en el mercado”, sentenció Azcárate.
En lo que concierne a solicitudes para el Comedor Universitario, la responsable de Acción Social de la Secretaría de Bienestar, expresó que “estiman que se han presentado unos 1.754 postulantes, es decir, el 50% del total de becas solicitadas”.
Todos ellos pueden acceder a una comida diaria, sólo durante los días hábiles, y en caso de no llegar al horario del almuerzo (previsto hasta las 14.30), pueden retirar la vianda y llevarla a su domicilio.
Los alumnos que no están becados pueden acceder a comer en el lugar y el importe por cada vianda es de 2.000 pesos, un número significativo teniendo en cuenta que en el 2023 el importe era de 500 pesos.
Finalmente la demanda estudiantil se inclina por la beca de Transporte que este año se eliminó y en cambio los chicos reciben una Ayuda Económica equivalente a 9.000 pesos.
“Entendemos que la cifra es muy ínfima respecto al importe que se paga por el boleto de colectivo, sobre todo, teniendo en cuenta que el mes que viene aumenta de 200 a 550 pesos, por lo que el gasto será más que considerable para los alumnos”, dijo la profesional.
La UNCuyo, sin “conectividad”
Pero este año no sólo se eliminó la beca de Transporte, sino también la de Conectividad que surgió tras la pandemia y se extendió hasta el 2023, aunque con cupos reducidos.
La misma consistía en otorgar un dispositivo, que podía ser una tablet y un teclado inalámbrico, a aquellos alumnos que se encuentren en situación de vulnerabilidad social o que no dispongan de acceso al sistema, lo cual imposibilita la permanencia y finalización de sus trayectorias socioeducativas en la Universidad.
“Es imposible poder otorgar este tipo de becas por los precios que se manejan en el mercado, por ello, decidimos eliminarla. En el 2022 se otorgaron 200 dispositivos, el año pasado el número se redujo al 50% y este año directamente se quitó del listado, lamentablemente”, cerró Azcárate.
Preocupa la continuidad de los estudiantes
En medio de toda esta crisis, recortes de becas y demás, el panorama que se vive en la Universidad es de mucha incertidumbre.
De acuerdo con lo referido por la directora de Acción Social de la Secretaría de Bienestar, “los costos para estudiar son muy elevados, sobre todo, para los alumnos que residen en zonas alejadas a la Ciudad. De hecho, muchos de ellos que poseen algún tipo de becas han devuelto el beneficio por no poder afrontar los gastos”.