La intención del Gobierno de Mendoza es pagar el 100% de las indemnizaciones a las personas que sean desvinculadas del ente de control del servicio de agua y saneamiento
El ministro de Gobierno, Infraestructura y Desarrollo Territorial, Natalio Mema, se presentó este martes en la comisión de Legislación y Asuntos Constitucionales (LAC) de la Cámara de Diputados para dar precisiones sobre el proyecto de disolución del Ente Provincial del Agua y de Saneamiento (EPAS). En su discurso, el funcionario le hizo un pedido especial a la oposición.
La intención de la gestión de Alfredo Cornejo es que el ente esté bajo la administración del Departamento General de Irrigación (DGI), a cargo de Sergio Marinelli. Más precisamente, dentro de la órbita de la Secretaría de Gestión Hídrica, encabezada por Diego Coronel.
Qué pasará con los trabajadores del EPAS
Bajo el argumento de una “restructuración administrativa” para brindar un mejor servicio a un menor costo para los usuarios mendocinos, Mema dio detalles de cómo será la disolución del EPAS.
En su exposición, el ministro pidió tener en cuenta las indemnizaciones de aquellas personas que no continúen trabajando en el Estado.
“Queremos respetar los derechos de aquellas personas que no van a continuar. Que cuenten con una indemnización plena. Mientras que aquellos que vayan a continuar trabajando sigan teniendo su antigüedad y salario”, explicó el exsubsecretario de Servicios Públicos.
En concreto, lo que pretende el oficialismo es que exista una excepción en la Ley de Contrato y que el Gobierno abone el 100% de las indemnizaciones y no el 50% como establece la Ley de Contrato de Trabajo.
Actualmente, el ente cuenta con 62 empleados y el proyecto garantiza un posible re acomodamiento tanto en Irrigación, AYSAM o en áreas del Poder Ejecutivo como del Legislativo.
“La hemos comenzado a conversar con los empleados del ente. Una parte irá a AYSAM y otros a Irrigación. Si existe una posibilidad de reubicación en el Ejecutivo como el Legislativo, podrán ir ahí; si no, serán indemnizados”, afirmó el ministro.
Por otro lado, Mema aclaró que la Provincia le destina 40 millones de pesos mensuales al EPAS para cubrir la diferencia de lo que el ente recaudaba para su funcionamiento. Sin embargo, a partir de esta reorganización, dejarán de hacerlo.
“Esa diferencia se producía entre lo que recaudaba el ente y lo que aportaban los mendocinos mediante un ítem que pagaban dentro de la factura de AYSAM. Esta partida se destina para cubrir el costo del organismo. Con esta reestructuración lo que se ha buscado es que lo que recauda el EPAS, le alcance para su funcionamiento”, enfatizó el funcionario.
Para cerrar, Mema adelantó que el EPAS continuará en funcionamiento hasta que el proyecto logre la sanción definitiva en ambas cámaras legislativa y se promulgue su disolución. Una vez transcurrido estos hechos, el ente comenzará con su proceso de liquidación.
“Calculamos que el proceso de liquidación se puede dar en un periodo de dos meses. En ese momento comenzaremos el traspaso del personal y las obligaciones continuarán, pero bajo el ala de Irrigación”, finalizó el ministro de Gobierno.