Un tribunal ruso ha ordenado el embargo de activos y cuentas de los bancos alemanes Deutsche Bank y Commerzbank en Rusia en el marco de una demanda interpuesta por una empresa energética rusa, propiedad en parte de Gazprom. Los bancos alemanes retiraron previamente sus garantías para la construcción de una planta de procesamiento de gas a raíz de las sanciones occidentales por la invasión rusa de Ucrania.