Desde el Gobierno nacional planean que el proyecto se convierta en una “política de Estado”. En la provincia ya se conoce la posible sede.
El anuncio del retorno del Servicio Cívico Voluntario a nivel nacional recordó en Mendoza a los años en los que un programa similar fue implementado en la Provincia bajo la gestión de Julio Cobos. Según describió un funcionario nacional que está en el armado de este “resurgimiento” del servicio, la experiencia mendocina fue muy importante para la nueva puesta en marcha el retorno. Además, la Provincia ya tendría sede para ofrecer este proyecto en un futuro.
La firma de Patricia Bullrich, ministra de Seguridad, y Sandra Pettovello, ministra de Capital Humano, selló la vuelta del Servicio Cívico en la Argentina, enfocado en jóvenes de entre 18 y 24 que no se encuentren ni estudiando, ni trabajando.
Para esto se efectuará una primera etapa en varias partes del país, concretamente en Campo de Mayo, en provincia de Buenos Aires; Bariloche, en Río Negro; Santiago del Estero, Jesús María, en Córdoba; Rosario, en Santa Fe; y en Misiones. Sin embargo, la provincia de Mendoza comienza a ganar terreno para formar parte de una posible segunda etapa.
Sobre esta posibilidad, el director general de Asuntos Prioritarios del Ministerio de Seguridad, Daniel Barberis, explicó a El Sol que “el puesto de Gendarmería en Tunuyán (correspondiente al Escuadrón N.°28) es una de las sedes alternativas para una segunda etapa“.
Sin embargo, la llegada del servicio a Mendoza dependerá de “como vaya saliendo la primera etapa“, que dará inicio el próximo mes de marzo de 2025.
Los detalles del Servicio para 2025
Barberis explicó cuáles son las claves de la nueva iniciativa y cómo se espera reintegrar a miles de jóvenes al estudio o insertarlos en el ámbito laboral.
“Estamos convencidos de que la primera cosa que tenemos que hacer es trabajar con las personas para que vuelvan a ser visibles“, aseveró el funcionario nacional. Esto se debe a que entienden que muchos de los jóvenes en esta situación no se sienten acompañados ni escuchados por su entorno.
Para dar luz a este proyecto se realizaron una serie de encuentros entre los ministerios de Capital Humano y Seguridad, en donde se acordó la utilización de los espacios de Gendarmería para que miles de jóvenes se instalen por 8 meses.
Allí, Berberis destacó que se llevarán a “chicos que no tienen cultura y metodología de trabajo“. Para esto, se informó que las enseñanzas aplicarán técnicas propedéuticas, que significan una instrucción preparatoria para el estudio de una disciplina específica.
Entre los contenidos que serán impartidos, se destacaron: técnicas para el manejo de emergencias civiles; módulos de técnicas de salud; contenidos para la inserción en oficios y alfabetización.
Sobre esta última, el funcionario nacional comentó que “algunos jóvenes salen de la secundaria con graves dificultades para leer y escribir, entonces se debe reforzar esto con los que ni siquiera la terminaron”.
Otro ministerio que tendrá una importante participación en el proyecto será el Ministerio de Educación, con el que se mantuvieron reuniones para cerrar la incorporación de un gran número de profesores al programa.
Tras los dos cuatrimestres de formación, los jóvenes serán puestos a disposición de Capital Humano para que se decida cuál será su futuro. Entre las posibilidades barajadas se señaló que podrán “seguir estudiando o trabajando”, pero es algo que se definirá al analizar particularmente caso por caso.
En todo este proceso se acompañará a los jóvenes con un esquema de salud que incluye apoyo psicológico y de control de adicciones. Se destacó la importancia de esto, ya que el programa apunta en gran medida a intervenir en jóvenes que viven en condiciones de extrema vulnerabilidad.
Según comentó el director Barberis, la idea final del programa es que se cumplan unos primeros 3 años interrumpidos y que, tras esto, el Servicio Cívico Voluntario se vuelva una “política de Estado”.
La importancia de Mendoza en el armado
Para la conformación de este nuevo proyecto, Barberis explicó que fue clave el análisis del servicio que se implementó en la Provincia en la gestión de Cobos y del intento frustrado en 2019, durante el mandato de Mauricio Macri.
“Tomamos los antecedentes del trabajo de (Julio) Cobos en Mendoza“, señaló el director nacional, y agregó que por esto, el proyecto cuenta con “el espíritu de Mendoza”.
El programa del exvicepresidente y actual diputado nacional, Julio Cobos, fue un programa de personalidad educativa que duró 3 años. Según relató el propio Cobos a El Sol, “el servicio le cambió la vida, tanto a los jóvenes como a sus familias”.
Sobre la iniciativa frustrada en 2019, el representante de la Unión Cívica Radical (UCR), que tuvo un rol clave en ese momento, destacó que “Bullrich me llamó para implementarlo a fines del mandato de Mauricio Macri”.
Además, comentó que el proyecto actual “es un programa con la misma finalidad” al que implementó en tierras mendocinas.
Sin embargo, el mendocino consideró que los espacios que tienen las Fuerzas Armadas de Argentina son más idóneos para la instauración del Servicio Cívico, y sumó que en su momento dialogó con Luis Petri, ministro de Defensa de Nación, que mostró un gran interés en este proyecto.
La implicación militar no está incluida en este nuevo proyecto, y aunque Barberis destacó que no se planteó realmente esta posibilidad, también señaló que no se puede dar un “no definitivo” a esta idea.
El contexto en Mendoza
Las condiciones que tienen los miles de jóvenes que se unirán al programa no están ausentes en Mendoza. Según los datos del Ministerio de Educación provincial, en 2023 643 alumnos abandonaron los estudios secundarios. Los últimos datos del desempleo provincial fueron de casi el 5%, que se traducen en alrededor de 26.000 personas desocupadas.
Sobre una posible llegada del servicio a la provincia, el exgobernador mendocino compartió su expectativa, pero señaló que dependerá de la coordinación del Gobierno nacional con su par provincial mendocino, especialmente porque habrá que “articularlo con los gobernadores”.
Además, como se explicó antes por Barberis, la posibilidad de que el servicio llegue a Mendoza dependerá principalmente de que la primera etapa de este programa produzca los resultados esperados por el Gobierno nacional.