Omar Carrasco calculó los efectos que puede haber en el mercado tras la tormenta granicera que afectó a unas 12.000 hectáreas productivas de la provincia
El granizo causó importantes daños en la zona productiva de Mendoza. Imagen ilustrativa.
El mercado de frutas y verduras es muy sensible a los vaivenes de la oferta y la demanda. Por eso es que la tormenta de granizo que este miércoles afectó a unas 12.000 hectáreas productivas en Mendoza podría influir sobre el precio de esos productos.
Así lo aseguró Omar Carrasco, presidente de la Unión Frutihortícola Argentina región Cuyo, quien durante la mañana del jueves dio un panorama de lo que está ocurriendo en las ferias de Mendoza.
“En dos o tres días vamos a tener información detallada, pero hay sectores donde el granizo se ha llevado el 100% de la producción“, lamentó el referente durante una entrevista con el programa “Primeras voces”, de radio Nihuil.
Un campo de melones destruido en Lavalle tras la tormenta que el 28 de febrero.
Qué pasará con los precios de frutas y verduras
“En este momento los precios no se han movido porque las ventas están bastante caídas. Pero en Beltrán, Barrancas y parte de Valle de Uco hay productores que nos han dicho que les quedó el campo como un billar. Eso va a tener un impacto”, analizó Carrasco, quien recordó también los aportes que hizo para el sector el recién fallecido referente justicialista Carlos Abihaggle.
Omar Carrasco, titular de la Unión Frutihortícola Argentina región Cuyo.
A la hora de pensar soluciones, el entrevistado propuso reflotar la idea de un registro frutihortícola que permita no sólo monitorear la evolución de ese sector de la economía, sino también “ayudar al productor y al consumidor para moderar de alguna forma impactos como los generados por esta tormenta”.
Estamos viendo que, como en la pandemia, hay familias que ponen una pequeña verdulería en su casa porque los jefes de hogar se han quedado sin trabajo
Y concluyó: “Hoy la gente lleva lo básico: papa, camote, lechuga, zanahoria, choclo, pimiento, berenjena y tomate (…). Estamos viendo, también, que como en la pandemia hay familias que ponen una pequeña verdulería en sus casas porque los jefes de hogar se han quedado sin trabajo: saben que, aunque les vaya mal, al menos así tendrán algo para el puchero“.