Las autoridades australianas se preparan para la llegada del ciclón tropical Alfred, que impactará la costa de Brisbane el jueves por la noche con fuertes vientos e inundaciones.

El primer ministro, Anthony Albanese, advirtió que el fenómeno meteorológico afectará principalmente a Queensland y Nueva Gales del Sur, poniendo en riesgo a más de 13 millones de personas. Como medida preventiva, se ordenó el cierre de más de 500 escuelas en la zona.
La Oficina de Meteorología estima que el ciclón, de categoría 2, traerá vientos de entre 95 y 130 km/h, además de lluvias torrenciales hasta el sábado. Ante el peligro, la Fuerza de Defensa Australiana está lista para asistir a la población.

Hasta el momento, no se han ordenado evacuaciones, pero se han activado sistemas de emergencia y prevención en Queensland, una región que en febrero sufrió graves inundaciones con saldo trágico.
Australia enfrenta cada vez más eventos climáticos extremos, atribuidos en parte al cambio climático y el aumento de gases de efecto invernadero en la atmósfera.