La actividad fue prácticamente nula este lunes y martes. El panorama parece que no cambiará hasta el próximo viernes, cuando está previsto que termine la medida de fuerza.
“No hay audiencias; la Justicia está paralizada”. Cada auxiliar, funcionario, empleado, fiscal o juez que desarrolla tareas en los diferentes juzgados o fiscalías de la provincia cuenta por lo bajo que el paro de los trabajadores del Poder Judicial es impactante y se siente con fuerza.
Se ha profundizado en las últimas jornadas en el fuero penal y este lunes y martes la actividad fue prácticamente nula. No recuerdan haber transitado un camino tan sinuoso como este en los últimos años. El retorno a la actividad “normal” que presentaba el sistema hasta fines del año pasado o principios de este no tiene fecha.
El conflicto es salarial y los judiciales aseguran que no van a frenar con los reclamos hasta obtener una respuesta positiva. Hablan que desde el Ejecutivo, la Procuración y la Suprema Corte se pasan la pelota y no dan respuesta.
Y por eso es que a los escalafones más bajos, quienes más se han comprometido desde el primer momento con la huelga, se le sumaron los funcionarios. El apoyo profundizó la crisis en los Tribunales: no sólo en todo a lo referido la recepción de denuncias, que es prácticamente nula en las Oficinas Fiscales (recomendaron radicarlas a través de la web), la Justicia de Familia y también la Civil han presentado inconvenientes porque han intentado continuar con la agenda diaria, pero al no haber auxiliares el avance de las causas que necesitan celeridad se bloqueó sin presentar resoluciones.
Los empleados del Poder Judicial volvieron a extender por otra semana el paro que viene complicando la atención en ese poder del Estado provincial, por reclamos salariales. Por un lado, los auxiliares de Justicia votaron este jueves continuar con la medida…
No hay operadores y las audiencias penales son escasas. Pasantes de facultades están realizando esas tareas para poder grabarlas. Se suspendieron debates orales y también juicios abreviados, un procedimiento relativamente simple que depende de un acuerdo entre partes. Tampoco desarrollan tareas con normalidad prosecretarios, secretarios y administradores. Todos se fusionaron en señal de apoyo para que el reclamo llegue o impacte con más firmeza.
Desde la semana pasada, el gremio judicial resolvió un paro de actividades en todas las dependencias internas y externas hasta el viernes 17 de este mes. Durante las jornadas se desarrollan asambleas y se potencian las críticas porque se trata del único gremio que no acordó la suba salarial en paritarias. La pregunta que se hacen es qué sucederá el sábado, cuando termine la medida de fuerza. La respuesta parece que no llegará en el corto plazo.