La inestabilidad y la incertidumbre económica juegan en contra de los que buscan reservar en la provincia.

Mendoza siempre se ha posicionado como uno de los destinos favoritos de los argentinos y extranjeros para vacacionar, muchos optan por visitar la provincia a lo largo del año y, otros, durante el verano. Sin embargo, las reservas para la temporada 2024 viene muy floja y se replica en la mayoría de los destinos locales.

La incertidumbre por lo que ocurrirá con la economía una vez que asuma Javier Milei el próximo 10 de diciembre como Presidente de la Nación, sumado a la inestabilidad económica, con “precios sujetos a modificación” constantemente por parte de los propietarios y hoteleros, son las variables que complican las reservas para la época estival mendocina.

Temporada complicada

En enero de este año, la visita de turistas en Mendoza cayó 36% respecto al 2022, es decir, de 220 mil visitantes en la primera quincena del año pasado, se pasó a 140 mil en el mismo periodo de 2023.

Para el próximo verano la situación no se perfila mejor y hay mucha preocupación en el sector, pese a que aún falta un mes para que culmine el año y la gente comience a idear sus vacaciones.

“Hasta el momento no vienen bien las reservas, todo puede ser revertido, pero hoy lo que se observa es que no hay mucha demanda para el verano. Muchos están especulando con el cambio de gobierno, las nuevas medidas, el tipo de cambio, en fin, factores macroeconómicos”, expresaron a El Sol fuentes vinculadas al sector turístico.

Por su parte, Diego Stortini, vicepresidente de la Federación Económica Mendoza (FEM) expresó que “Mendoza no está posicionada como una de las provincias para disfrutar durante el verano, aunque sí durante todo el año llegan muchos visitantes”.

Asimismo, el empresario destacó que “lo que concierne a turismo aventura, las reservas se están moviendo. Esto se refleja en destinos como San Rafael, Manzano Histórico (Valle de Uco) y Potrerillos”.

En este punto hay que aclarar que los parajes no están con reservas al 100% y lo que hay, por ahora, solo son consultas. En estos destinos, el perfil de visitante es mendocino o de provincias como Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y Neuquén

“A diario recibimos entre ocho y diez consultas para reservar las cabañas, pero muchas quedan en eso, una consulta. La gente pide fotos, especificaciones y la mayoría sólo plantea la posibilidad de alojarse entre tres y cinco días, no más”, comentó el dueño de un complejo ubicado en el Sur provincial.

Rubén es dueño de un complejo ubicado en Potrerillos, y aseguró que “hay consultas, pero no mucho más”. “Sí se están cerrando estadías para las Fiestas, con una estadía mínima de tres días y para el verano, muy pocas”, amplió.

Otro tipo de atractivo que sí se ha posicionado en Mendoza es el enoturismo, traccionado especialmente por turistas internacionales.

“Desde noviembre en adelante hubo un fuerte impacto de consultas y reservas, lideradas por extranjeros, principalmente, de origen brasileño”, expresó Stortini.

Precios sujetos a modificación

Aunque los precios de los alojamientos se publican en pesos, de forma implícita están atados a la evolución del dólar blue. Además, las tarifas se corrigen de forma constante en función de la inflación, por lo que una cotización a principio de semana es muy factible que se modifique días después.

La mayoría de los complejos ofrece las tarifas con una frase que se repite entre los turistas: “Los precios están sujetos a modificación”.

“Está claro que el que cancela hace negocio, el que paga una parte, que por lo general es el 35% del total, a la hora de cancelar tendrá que ajustarse al tipo de cambio del momento. Nadie puede cerrar una tarifa dos o tres meses antes de pagar y que no sufra modificaciones, eso no existe en Argentina por los altos índices inflacionarios”, comentó Stortini.

En cuanto a los valores, los empresarios comentaron que hay para todos los gustos y bolsillos.

En el Valle de Ucohay cabañas que cuestan 30 mil pesos la noche y de ahí en adelante. El paquete semanal para una familia de cuatro integrantes va de los 250 mil pesos hasta 400 mil pesos.

“La hotelería ha aumentado bastante, en algunos casos, se han ajustado en un 30% o 40% respecto del 2022, muchas tarifas están dolarizadas, y en los hoteles vinculados al enoturismo, nada baja de los 60 mil u 80 mil pesos la noche, en lo que son tarifas accesibles”, contó Stortini.

En lo que respecta a San Rafael, las cabañas tienen precios disímiles. Es posible encontrar alojamientos por 50 mil pesos la noche y de ahí para arriba. En las que poseen jacuzzi y ofrecen un servicio deluxe los valores superan los 90 mil pesos, la noche.

En todos los destinos la estadía es muy similar. Se están exigiendo como mínimo entre tres y siete días, pero la gente, por lo general, no reserva por más de cinco días.

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