La ministra Mercedes Rus se comprometió a “trabajar en una propuesta salarial superadora”. El objetivo es frenar el malestar de los efectivos.
En medio de un creciente malestar en la denominada “familia policial”, que reclama mejoras salariales, la ministra de Seguridad, Mercedes Rus, se reunió este martes con representantes de la Asociación Mutual del Personal Policial (Amuppol) y se comprometió a trabajar en la mejora de algunos ítems puntuales del bono de sueldo.
Por ley, los efectivos policiales y penitenciarios no pueden sindicalizarse y, por lo tanto, no tienen paritarias propias. Los aumentos que reciben son otorgados por decreto, con porcentajes similares a los que negocian los gremios de la administración central con el Gobierno.
Mientras esta semana comenzaron las paritarias con los principales gremios estatales, Amuppol envió una carta a Rus para solicitar un encuentro, con el objetivo de plantear las demandas propias de los policías. Tras esa reunión, la ministra confirmó que van a “trabajar en una propuesta salarial superadora”.
Si bien oficialmente no hay detalles sobre esa propuesta, trascendió que Seguridad analiza reforzar alguno de los ítems o adicionales que cobran los efectivos para frenar el descontento.
Aún no hay plazos determinados para que los policías y penitenciarios perciban ese eventual incremento. Todo depende del resultado de la paritaria que lleva adelante el Ejecutivo con el resto de los empleados de la administración central.
Los primeros en sentarse a conversar con el Ejecutivo este lunes fueron el Sindicato Unido de Trabajadores de la Educación (SUTE) y la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE). Un día después fue el turno de la Asociación Mendocina de Profesionales de la Salud (Ampros).
La oferta oficial incluyó un incremento de 12% en febrero y marzo, más un bono de $60.000. Los tres gremios la rechazaron y las negociaciones ingresaron en cuarto intermedio.